Me siento bien. Los gritos no distraen mi atención. Me voy a morir

Una vez estaba en casa de mi amigo Gregorio pistiando tranquilon en la noche y hablando de una morra la cual hizo que me pusiera muy triste como por 3 días. Entonces de un instante a otro (como en todas mis historias) llega un amigo increíblemente fiestero al cual no frecuentamos mucho porque amamos nuestra salud mental y extremidades (ese día no tanto) en putiza en su Mazda-3 el cual estaciona más mal que la verga arriba de la banqueta.

"¡Hey cabrones! Pues que pedo ¿Quieren fiesta sí o no?" - preguntó en tono desafiante
"Hey que onda José, estas aplastando el jardín de mi mamá, mueve el carro. Anda enojada porque le han estado arrancando flores" - dijo preocupado mi amigo Gregorio
"Me pela la verga este jardín, aquí traigo cahuamas" - contestó cordialmente José

Entonces fuimos a una fiesta y seguimos tomando hasta un punto estúpido cuando la causa ya no es divertirse si no acabar contigo mismo para que tu consciencia te deje en paz un rato. Inesperadamente me suena el celular y era la morra por la cual mi autoestima había bajado tanto.

"Que sea lo que tenga que ser" - Me dije a mi mismo moviendo la boca. Conteste el teléfono y acto seguido di un largo trago a un vaso de vodka puro que traía mi amigo Gregorio... Ya no supe nada.

Vodka: 8,000,000
Yo: 0

Al día siguiente me llama mi amigo Gregorio

"Te pasaste de verga we, no seas mamon" - En un tono enojado
"Lo sé we" - Contesté avergonzado
"¿Me prestas un control de Wii?" - Me preguntó rápidamente

Total que le dije que sí y cuando se lo fui a dejar a su casa le arranque una flor al jardín de su mama.